«Si alguien me pregunta de qué trata la novela, le diré que de perder a un hombre, porque no sé qué decir. Pero es verdad que durante mucho tiempo no supe dónde se encontraba, aunque lo supe y lo dejé de saber, lo volví a saber y volví a perderlo.»
La narradora de esta historia es una traductora y académica de mediana edad que intenta escribir una novela (que es esta novela) sobre una relación pasional y neurótica que tuvo años atrás con un hombre más joven que ella. Tomando el desamor como si fuera una autopsia por realizar o un texto críptico que hay que convertir en algo legible, la narradora nos conduce por sus recuerdos y reflexiones, dispuestos de forma fragmentaria y desordenada y plagados de descripciones que rayan la obsesión clínica. Así, asistimos a una búsqueda de la protagonista por determinar qué es lo que sabe sobre sí misma y qué es lo que realmente ocurrió, pero no tardaremos en empezar a sospechar, junto a ella, que ningún recuerdo sale intacto de la equivocidad de la memoria, y que cualquier relato del pasado termina por convertirse en ficción.
Publicada originalmente en 1994 (y ya editada en castellano por Alpha Decay en 2014), esta es la primera y única novela de Lydia Davis, celebrada autora norteamericana de relato corto.